….VIENE
DE LA SEGUNDA PARTE…CONTINUCIÓN…
La fascinación puede ser de
espíritu a encarnado y de encarnado a encarnado.
Vemos que ciertas
personas encarnadas ejercen un efecto sobre otras, una especie de seducción que
parece irresistible. Y esto se observa en las religiones, filosofías, política,
literatura, etc…
Sobre la obsesión, no
podemos olvidar que existen grupos de espíritus dedicados a fomentar conflictos
y hechos negativos entre la humanidad, estando entre sus prioridades,
precisamente, el establecer procesos obsesivos.